EL pensamiento verdadero se parece a un demonio que perturba los orígenes de la vida, o a una enfermedad que ataca sus raíces mismas. Pensar continuamente, planteamos problemas capitales a cada momento y experimentar una duda permanente respecto a nuestro destino; (...) Hay demasiadas cosas que añorar en un mundo en el que nada debería ser añorado.
En las cimas de la desesperación, Tusquets, 1991, Barcelona; p.76
Emile Cioran - filósofo rumano exiliado en Francia
Como Sartre habla de ese continuo pensar... que nos hace doler la cabeza, distraernos de las cositas y pequeñas decisiones que tomamos o debemos tomar cotidianamente, pensando en las grandes cosas que tenemos que decidir:
¿Pero no son todas fugas hacia adelante y afuera de los demonios que tenemos adentro criados desde nuestra niñez?
¿Y no actúan como demonios acaso esas ilusiones y esperanzas de tener mucho dinero, poder, hijos, príncipes azules, diosas sexuales, honores y recompensas?
Emile Cioran - filósofo rumano exiliado en Francia
Como Sartre habla de ese continuo pensar... que nos hace doler la cabeza, distraernos de las cositas y pequeñas decisiones que tomamos o debemos tomar cotidianamente, pensando en las grandes cosas que tenemos que decidir:
- ¿nos vamos a África a trabajar con los que están muriendo?
- ¿A Chaco a dar comida a los Qom que están muriendo de hambre y abandono sin guerra declarada... sin que la Gorda Carrió que tanto habla de la República se va a Punta del Este los recuerde salvo en sus oraciones? (¿y dónde está su dios personal?)
- ¿Las sierras de Córdoba? ¿Bariloche?
- ¿Otro país donde la vida sea más sencilla ordenada, pero donde mis amigos no hablen argentino ni te juntes a patear una pelota en una plaza?
¿Pero no son todas fugas hacia adelante y afuera de los demonios que tenemos adentro criados desde nuestra niñez?
¿Y no actúan como demonios acaso esas ilusiones y esperanzas de tener mucho dinero, poder, hijos, príncipes azules, diosas sexuales, honores y recompensas?